miércoles, abril 07, 2010

Carrera armamentista


Los enanitos de jardín
absorben los vicios humanos
y crecen a la par de los hongos.
La adrenalina se hace esquiva
entre pinceles esmerilados,
un ojo artificial gotea
el tráfico pulposo de las miradas.
Alguien dispara su arma de juguete
contra un origami
hecho de papel ecológico
y juega a las escondidas
con sus propios fantasmas.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Los fantasmas no existen, ni somos tus propios padres.

Anónimo dijo...

Los fantasmas no existen, ni somos tus propios padres.

Anónimo dijo...

putos enanos! cuando acabará su reino del terror?!

Marquinho dijo...

anónimos gracias por pasar, la festina fantasma existe en el ganglio subliminar de toda herida, otro modo de contradicción nos convertiría en enanos de juguete!

Marquinho dijo...

hay perros fascistas? Igualmente el problema está en la conformación de la lengua, más que en el gerundio. Lo dejo porque caen enanos del cielo, saludos a su padre.

merlinmundo dijo...

a uno de los enanos no le pegó! está claro que es un infiltrado que se hace el dormilón...
primo, acaba ya este reino del terror y dile a la muñeca que lo quite de su miseria con la sibilante escupida de su silenciador...

As dijo...

Esta bueno!

Unknown dijo...

te dejo un abrazo grande amigo en este día del trabajador!!!!

Adal

Marquinho dijo...

Gracias a todos...